15 cualidades que debe tener un CIO
Las organizaciones de Latinoamérica están cambiando la forma en cómo hacen negocios. La innovación en tecnología digital tiene un rol protagónico porque impacta a todo tipo de empresas, incidiendo en un cambio de cultura corporativa que optimiza procesos a lo largo de la cadena de valor. En este contexto, los CIO tienen delante el desafío de desarrollar habilidades que resalten su liderazgo y capacidad para tomar los riesgos que la industria necesita.
15 cualidades que debe tener un CIO:
- Flexibilidad para el cambio: al liderar procesos de cambio, deben ser un ejemplo a seguir en cuanto a adaptabilidad.
- Autoconocimiento: conocer las fortalezas y oportunidades de mejora individuales, es un plus para aprovechar en el momento indicado.
- Actual e informado: el mundo está en constante cambio, por tanto, hay que tomar el hábito de nutrirse de las últimas novedades tecnológicas para estar a la vanguardia.
- Integridad: un CIO debe ser un profesional altamente confiable, especialmente en el manejo con proveedores y los protocolos de privacidad para información sensible.
- Capacidad de investigación: para proponer se necesita conocer. Hay que ir más allá del área y encontrar la razón de ser de cada cosa. También resulta útil indagar sobre el sector donde se labora y la competencia.
- Innovación: significa automotivarse y guiar al equipo a hacer las actividades de forma diferente. Romper rutinas y esquemas.
- Resiliencia: simplemente es desarrollar la capacidad de aprender de los errores y volver a empezar con entusiasmo tras un fracaso.
- Colaboración: el espíritu de servir a los demás es un estímulo para buscar soluciones para que otros hagan mejor su trabajo.
- Habilidad para construir relaciones: definitivamente no se debe estar en un cubículo aislado. Es necesaria la comunicación con diferentes áreas y tipo de roles.
- Perspectiva global: lo que se hace o se deja de hacer impacta en el trabajo, la vida personal y el mundo entero (no es una exageración). Por ello hay que abrir la mente a soluciones que mejoren la calidad de vida de muchos o repercutan en sostenibilidad.
- Trayectoria profesional: no se trata de tener muchos títulos. Lo relevante es aprovechar la experiencia y transmitir el conocimiento para aportar soluciones.
- Practicidad: a la hora de mostrar resultados o presentar proyectos, los algoritmos deben pasar a segundo plano, se debe trabajar en mensajes claros, cortos y contundentes.
- Escucha activa: entregar una solución efectiva depende en gran parte de qué tan bien se comprendió la necesidad, de ahí la importancia de escuchar.
- Trabajo en equipo: parte de la labor de un líder es guiar al grupo a cumplir metas conjuntas y no sólo individuales. Por algo dicen que la unión hace la fuerza.
- Tiempo personal: un hábito de las personas exitosas, es que apartan unas horas del día para la práctica de un pasatiempo. Esta es una forma de estimular la creatividad y la concentración. Así mismo, el tiempo en familia es vital. El secreto está en el equilibrio.
Ahora bien, para poner en práctica estas cualidades, el primer paso es determinar cuáles ya están desarrolladas, están en proceso o no se han logrado. La siguiente fase es trabajar en las que están en proceso de desarrollo y por último las que se deben integrar desde cero. Recordando que el hábito hace al maestro. Así que, luego de repetir acciones, estas se convertirán rápidamente en rutina. Pronto verá resultados, así que ¡manos a la obra!